En Mar del Plata, donde la oferta gastronómica crece cada año, un grupo de amigos encontró un espacio que nadie había explorado del todo: una sandwichería artesanal con propuesta propia, variedad de panes y recetas que cruzan creatividad con calidad. Así nació Atilio’s Sandwich Co.
“Queríamos hacer algo distinto dentro de la gastronomía marplatense”, cuenta Atilio Lanza, uno de los fundadores. “Vimos que la sandwichería era un rubro que nadie había apostado a reinventar, así que decidimos ir por ahí.”
La idea fue simple pero poderosa: tomar esos sándwiches increíbles que se ven en redes y llevarlos a un nivel profesional, artesanal y accesible, tanto para disfrutar en los locales como para pedir desde casa.
Hoy Atilio’s cuenta con cuatro sucursales —Chauvin, Alem, Torrión y Aldrey— y funciona desde la mañana hasta la noche. “Manejar cuatro sucursales es un desafío importante, pero gracias al equipo y a la gente que confía en lo que hacemos, se vuelve más ameno.”
Cada local ofrece la misma experiencia: sándwiches artesanales, panes variados, ingredientes frescos y un menú versátil que también incluye café y pastelería clásica para los horarios de baja demanda.
Medialunas, budines, focaccias y sándwiches XL conviven en una carta pensada para que siempre haya algo rico para comer.
Los favoritos del público conforman un top tres infaltable:
“Entre panes se puede poner lo que uno quiera: carnes, verduras, fiambres. Buscamos variedad, materia prima de primera y un producto distinto”, explica Atilio.
Atilio’s nació con la convicción de que la sandwichería iba a evolucionar, y su crecimiento confirmó esa intuición. El proyecto se fortaleció no solo por su propuesta gastronómica, sino también por su forma de gestionar.
“Atilio’s es un aprendizaje constante: nos permite mejorar en el tratamiento de la mercadería, medir costos laborales y hacer más eficiente toda la estructura”, dice Atilio.
Esa filosofía de “no saltear etapas” los llevó a consolidarse con dedicación, ensayo y error, y una visión clara de cómo escalar sin perder calidad.
Uno de los grandes retos de la marca es equilibrar el volumen de demanda presencial con los pedidos online, especialmente en horarios de mediodía y noche.
Sin embargo, desde el inicio incorporaron la Tienda Online de Fudo, que se integró naturalmente al flujo del negocio. “La cocina no colapsa ante una demanda alta porque ya tenemos ajustados los tiempos y los procesos para que la respuesta sea la misma en ambos canales.”
La tienda online se volvió clave para agilizar pedidos sin depender de WhatsApp o llamadas, y permitió recibir órdenes de forma ordenada y con una experiencia más clara para el cliente.
Y con la llegada de Tienda Online Plus, dieron el siguiente paso: “Nos permitió fidelizar más a los clientes. Ahora podemos identificar quiénes son habituales y generar esa vinculación que buscamos como marca.”
Para un negocio con cuatro locales y un alto volumen de ventas, contar con información clara y en tiempo real es fundamental.
“Fudo nos permite llevar un control día a día de ingresos, gastos y cuáles son los sándwiches más vendidos. Es estadística minuto a minuto.”
Gracias a Fudo, pueden tomar decisiones con datos y mantener la operación alineada entre todas las sucursales, sin perder trazabilidad ni control.
Más allá de la eficiencia y el crecimiento, hay algo que Atilio’s valora por encima de todo: el vínculo con la gente.
“Es muy gratificante que te digan ‘ayer pedí Atilio’s y estaba muy rico’. Queríamos lograr ese sentido de pertenencia, ese ‘quiero comer un buen sándwich, pido Atilio’s’, y de a poco lo estamos logrando.”
En una ciudad con historia para el buen comer, Atilio’s se ganó su lugar con productos honestos, un equipo comprometido y una gestión inteligente que acompaña su crecimiento.