14/11/2025Lectura: 8min

Buffet GEVS: comida casera, comunidad y gestión con sabor

Buffet GEVS: comida casera, comunidad y gestión con sabor
Compartir

En Villa Devoto, el Club GEVS es un punto de encuentro para el barrio. Detrás de él hay vecinos, socios y también un equipo gastronómico que entendió que cocinar puede ser otra forma de construir comunidad.

“Durante dos años el club estuvo tomado y sin actividades. Fue una tarea ardua recuperarlo, pero lo logramos entre vecinos, padres y socios del barrio”, recuerda Flavio, uno de los tres hermanos que hoy están al frente del buffet.

Con el tiempo, el club volvió a llenarse de vida. Las canchas se poblaron de chicos, el gimnasio volvió a tener movimiento y el olor a comida casera volvió a invadir el aire.

“Llegamos un año después de la reapertura y empezamos con el buffet. Crecimos junto al club, apoyándonos mutuamente. Hoy el GEVS volvió a ser un lugar de encuentro”, cuenta con orgullo.

Un buffet que no para de crecer

El buffet del club funciona todos los días y en todos los horarios: desayuno, almuerzo, merienda y cena. En un mediodía común pueden salir más de 500 platos, entre los que predominan las comidas caseras de siempre: milanesas, pastel de papa, parrilladas y pastas.

“Lo que más sale es la comida de hogar. Comida con sabor, la que la gente quiere comer todos los días”, explica Federico, quien coordina la operación diaria del buffet.

A esas preparaciones se suman opciones vegetarianas, pastelería y un menú que se adapta a los distintos públicos del club. “Hay gente que viene a entrenar y se queda a almorzar; otros pasan por una merienda o una cena familiar. El buffet es parte de la rutina de todos los que vienen al GEVS.”

Detrás de la barra y la cocina, los hermanos reparten roles, turnos y responsabilidades. “Somos tres, y eso nos permite cubrir los horarios y mantener una misma visión. Cada plato tiene que ser abundante, fresco y bien hecho, como si lo sirviéramos en nuestra propia mesa”, dice Flavio.

Ser gastronómico también es ser parte

La historia del buffet está marcada por la vocación y el trabajo de quienes lo sostienen. “Empezamos ayudando a nuestro viejo, primero como algo momentáneo mientras estudiábamos, y al final la gastronomía se volvió parte de nuestras vidas”, cuenta Flavio.

Con los años, esa experiencia se convirtió en una forma de estar cerca de la gente. “Esto no es solo un negocio: es un espacio donde conocemos a las familias, vemos crecer a los chicos del club, compartimos historias. Hay un vínculo que va mucho más allá del plato.”

En el GEVS, la gastronomía es más que una tarea diaria: es una extensión del espíritu del club, un reflejo de lo que significa sostener un lugar entre muchos.

Fudo: el socio invisible detrás del mostrador

Con tanto movimiento, la organización se volvió un desafío central. Los momentos más intensos del día —el mediodía y la noche— podían convertirse en un caos, hasta que llegó Fudo.

“Los cuellos de botella se dan en los horarios pico, pero con Fudo los pedidos llegan a cocina en segundos. Antes tomábamos los pedidos por WhatsApp y era más lento. Ahora todo entra directo al sistema, y la cocina empieza a trabajar enseguida”, explica Federico.

La tienda online se convirtió en una herramienta clave: los clientes pueden pedir desde un link publicado en Instagram o en los estados de WhatsApp, lo que agiliza el flujo y evita errores.

Además, los reportes de venta permiten tener una visión completa del negocio. “Es información que antes me llevaba horas conseguir. Ahora puedo ver qué platos funcionan mejor y decidir con datos.”

¿Quiénes acá arrancan el finde con una buena pizza 🍕🍻🥟Así de lindas salen, y sin filtro...Apr

Hoy el Buffet GEVS no solo sostiene al club: también lo impulsa. Cada plato servido, cada evento organizado y cada cliente que vuelve son parte de una historia más grande —la de un espacio recuperado por y para su comunidad—.

Y con Fudo acompañando su crecimiento, esa historia sigue escribiéndose todos los días, entre el aroma a comida casera y el murmullo alegre de un club que volvió a latir.

 

FUDO

Comentarios


Posts Relacionados

Lectura: 9min FUDO

Mirai Food Lab: dos culturas, una misma pasión por la cocina

En el corazón del MUT de Santiago de Chile, hay un lugar donde la técnica japonesa y la creatividad chilena se encuentran. Se llama Mirai Food Lab, y detrás de sus sabores están ...

20/10/2025

Lectura: 8min FUDO

Ceci Fullone Pastelería: el dulce salto de una contadora a emprendedora

Hay decisiones que se piensan durante años, hasta que un día simplemente se dan. Eso fue lo que le pasó a Cecilia Fullone, creadora de Ceci Fullone Pastelería, quien cambió las ...

16/10/2025

Lectura: 7min FUDO

Dátil Vainilla: la pastelería vegana que cambió la forma de disfrutar lo dulce en Pucón

En el corazón de Pucón, Chile, una cafetería y pastelería está demostrando que lo saludable también puede ser irresistible. Se llama Dátil Vainilla, y nació de una idea sencilla ...

08/10/2025